TIÑIENDO EL AIRE encontramos en primer lugar un capitel de estilo neoclásico, perteneciente a la fachada del colegio del Carmen.
Un halcón en vuelo descendente, como alegoría al arte de la cetrería tan arraigado en la ciudad de Écija.
PALACIO DE PEÑAFLOR
(Siglo XVIII)
Declarado monumento nacional, es una de las obras más relevantes del barroco civil andaluz.
Su fachada, con decorados al fresco, y su largo balcón curvo que se adapta al recorrido de la calle culmina en su portada barroca y en el mirador que cierra el conjunto,
haciendo esquina, le convierten en una pieza de mucha entidad como apertura gráfica del mural.
Como ambientación se superpone un carruaje modelo Landó de
Labourdette (siglo XIX) tirado por un tronco de yeguas*.
*Imagen del libro: "Cárdenas, Caballos y Casa"
Como pieza de enlace encontramos una torre albarrana, resto de la antigua muralla almohade (s. XII) de la que encontramos vestigios en diferentes ubicaciones a lo largo de su recorrido a través de la ciudad actual.
TORRE DE LA IGLESIA
DEL CARMEN (Año 1637) Construcción de ladrillo enfoscado de cinco cuerpos, flanqueada por pilastras en cuyos fustes se abren nichos que albergan esculturas de santos.
A la derecha, a continuación está laESPADAÑA DEL CONVENTO DE SANTA FLORENTINA (Año 1791).